Las políticas publicitarias de Google están diseñadas para garantizar que nuestros usuarios tengan una experiencia segura y positiva, así como para cumplir con las leyes aplicables. Esto significa que prohíben el contenido que consideramos dañino para los usuarios y para el ecosistema publicitario en general.
Estas políticas abarcan cuatro áreas generales:
- Contenido Prohibido: Contenido que no se permite nunca, como contenido sexual explícito, productos falsificados o bienes peligrosos
- Prácticas Prohibidas: Acciones que no se permiten al publicar anuncios, como tergiversar su identidad o lo que vende
- Contenido Restringido: Contenido que se puede promocionar, pero con limitaciones, como bebidas alcohólicas, juegos de apuestas y productos relacionados con el cuidado de la salud
- Estándares Editoriales y Técnicos: Estándares de calidad para garantizar que los anuncios y las páginas de destino sean claros, profesionales y funcionales
Utilizamos la IA de Google combinada con la evaluación humana para asegurarnos de que los anuncios satisfagan estas políticas. Nuestras tecnologías de aplicación de políticas aprovechan la IA de Google, que se basa en modelos creados a partir de las decisiones tomadas por revisores humanos, para proteger a nuestros usuarios y resguardar la seguridad de nuestras plataformas de anuncios. La revisión de los casos más complejos, graves o que se prestan a diferentes interpretaciones suele quedar en manos de nuestros expertos especialmente capacitados.
