Es el beneficio que obtienes de tus anuncios y fichas de producto gratuitas en comparación con lo que has invertido en ellos.
Para calcular el ROI, suma los ingresos que has obtenido de tus anuncios y fichas, réstales los costes generales y, a continuación, divide el resultado entre los costes generales: ROI = (Ingresos - Coste de los bienes vendidos) / Coste de los bienes vendidos.
Ejemplo
Supongamos que tienes un producto que cuesta 100 € producirlo y se vende por 200 €. Si vendes seis unidades de este producto gracias a la publicidad de Google Ads, el total de las ventas será de 1200 €. Supongamos también que tus costes de Google Ads son de 200 €. El ROI sería (1200 € - (600 € + 200 €)) / (600 € + 200 €), es decir, un 50 %.
Para facilitar la medición del ROI de Google Ads, tendrás que hacer un seguimiento de las conversiones, es decir, de las acciones que quieres que los clientes lleven a cabo en tu sitio web después de hacer clic en tu anuncio, como una compra, un registro o una descarga. Prueba el seguimiento de conversiones o Google Analytics. Ambas herramientas son gratuitas y te ayudarán a hacer un seguimiento de las conversiones en tu cuenta.
El ROI suele ser la medida más importante para los anunciantes porque muestra el efecto real que Google Ads tiene en una empresa. Aunque es interesante conocer el número de clics e impresiones que consigues, resulta incluso más útil saber cómo contribuyen los anuncios y fichas a que tu empresa consiga buenos resultados.
