La encriptación protege tus datos del acceso o robo de usuarios no autorizados. El proceso consiste en convertir tus datos simples y fáciles de entender en una cadena aleatoria y no legible. Podríamos considerarlo equivalente a colocar los datos dentro de una caja cerrada y tener solo una llave. Sin la llave que se usa para cerrar o “encriptar” los datos, a los usuarios no autorizados les resultará difícil acceder a ellos y comprenderlos.
En Google, usamos varias capas de encriptación, incluida la encriptación de sobre, para proteger los datos de los clientes. La clave que se usa para encriptar tus datos se denomina clave de encriptación de datos (DEK), que puedes encriptar o “envolver” aún más con una clave de encriptación de claves (KEK). Este proceso de encriptación de una clave con otra se denomina encriptación de sobre.