Una señal de consentimiento representa la opción de consentimiento de un visitante, que puede ser:
- Concedido: el usuario ha dado su consentimiento para el tratamiento de datos específico.
- Denegado: el usuario ha rechazado el consentimiento para el tratamiento de datos específico.
Las señales de consentimiento son fundamentales para garantizar que los sitios web y las aplicaciones cumplan las normativas de privacidad, como el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD), respetando las decisiones de los usuarios sobre sus datos. Las etiquetas y las herramientas de Google pueden leer estas señales de consentimiento y ajustar su comportamiento en consecuencia.
Por ejemplo, si un usuario rechaza el consentimiento para que se usen cookies de analíticas, las etiquetas de Google Analytics no registrarán su actividad en el sitio.